El Oscar a Mejor Película para "Nomadland", de Chloé Zhao, seguido por los premios entregados a Frances McDormand y a Anthony Hopkins en las máximas categorías de actuación, cerraron una ceremonia novedosa y muy diferente a lo que solía verse en las entregas que realiza hace 93 años la Academia de Hollywood.
Con un tono mucho más personal e íntimo que en ocasiones previas, los organizadores de los Oscar llevaron a cabo una gala distribuida en cuatro locaciones, dos de ellas en Los Ángeles, una en París y otra en Londres; que estuvo marcada por un veloz ritmo y un importante cambio en el orden de las candidaturas.
La mayor de esas modificaciones ocurrió hacia el final del evento, cuando la antepenúltima terna presentada, que siempre correspondió a Mejor Actriz o a Mejor Actor, fue la de Mejor Película, obtenida por "Nomadland", de la cineasta Chloé Zhao, quien a su vez se convirtió en la segunda mujer en recibir el galardón a Mejor Dirección en la historia.
Luego, de la mano de "Nomadland" llegó el turno para la brillante Frances McDormand, que obtuvo su tercer Oscar a Mejor Actriz por el nostálgico y dulce rol protagónico de la cinta, una verdadera demostración de lo mejor de su destreza.
Por su parte, el premio a Mejor Actor fue recibido por Anthony Hopkins, que a sus 83 años obtuvo por segunda vez ese reconocimiento por su magnífico papel en la película "El padre", dirigida por el francés Florian Zeller.
Las tres atractivas ternas fueron presentadas como corolario de una noche signada por un ambiente un poco más descontacturado, sin anfitrión o anfitriona que condujera de manera fija la velada, y que recordó a otros lauros del rubro como los Globos de Oro.
Ambientados por la dirección musical del baterista y DJ Questlove en reemplazo de la típica orquesta, las y los presentadores de las categorías recorrían la famosa Union Station de Los Ángeles -la locación principal de esta ocasión- mientras describían las personalidades y trayectorias de los nominados antes de revelar los resultados, desviándose del manto de frialdad que caracterizó las últimas transmisiones.
Quizás motivados por la sensibilidad que provoca la pandemia de coronavirus, los organizadores de la Academia eligieron ese matiz para una entrega que ya se perfilaba además como la más diversa y empática hasta el momento desde que se conocieron las candidaturas.
Esa mutación también tuvo su correlato en el ritmo de la ceremonia, que se desarrolló de una forma mucho más veloz, obviando por primera vez la interpretación en vivo de las obras nominadas a Mejor Canción Original, lo cual quedó en evidencia cuando promediando la mitad de la gala se conoció el resultado del premio a Mejor Dirección.
El galardón fue presentado por el surcoreano Bong Joon-ho, quien el año pasado dio el batacazo en esa terna con "Parásitos" -que también se llevó entonces el reconocimiento como Mejor Película- y que esta vez repasó las candidaturas a través de las respuestas que dieron los nominados a la pregunta "¿Qué es el cine para vos?", siguiendo la propuesta de la Academia para esta edición.
En tanto, la actriz surcoreana Youn Yuh-jung se llevó el primer Oscar de su carrera a los 73 años en la categoría de Mejor Actriz de Reparto por su rol en el filme "Minari", dirigido por Lee Isaac Chung, y se convirtió así en la primera mujer nacida en ese país en recibir dicho reconocimiento.
En la película, de corte autobiográfico, Yuh-jung interpreta con humor y de una forma conmovedora a la abuela de una familia proveniente de Corea del Sur que se instala en una zona rural de los Estados Unidos para cumplir su propio "sueño americano".
En su categoría, competía con María Bakalova, por la secuela de "Borat"; Glenn Close, por "Hillbilly, una elegía rural"; Amanda Seyfreid, por "Mank", y la ya ganadora de ese premio Olivia Colman, por "El padre".
Daniel Kaluuya logró lo propio en la terna de Mejor Actor de Reparto por su papel en la cinta "Judas y el mesías negro", del cineasta Shaka King, en la que encarna a Fred Hampton, líder revolucionario del partido de las Panteras Negras asesinado por el FBI a fines de los 60.
El británico integraba esa terna junto a Lakeith Stanfield, su compañero en la cinta, Sacha Baron Cohen ("El juicio de los 7 de Chicago"), Leslie Odom Jr. ("Una noche en Miami...") y Paul Raci ("El sonido del metal").
Luego se entregaron los premios a Mejor Diseño de Producción y a Mejor Fotografía, que reconocieron en ambos casos el trabajo artístico realizado en "Mank", la cinta de Netflix dirigida por David Fincher que narra el detrás de escena durante la confección del guion del clásico "El ciudadano", de Orson Welles.
En tanto, "Soul", de Disney, ganó el premio a Mejor Película Animada; mientras que en Mejor Edición fue reconocida "El sonido del metal", la cinta de Darius Marder producida por Amazon.
En el inicio de la ceremonia, la británica Emerald Fennell se llevó el primer Oscar de su carrera en la categoría de Mejor Guion Original por "Hermosa venganza", mientras que el francés Florian Zeller lo hizo en la terna de Mejor Guion Adaptado por "El padre" desde la sede emplazada en París.
Otro galardón relevante fue el de Mejor Película Internacional para "Otra ronda", dirigida por el danés Thomas Vinterberg, quien en su discurso confesó que su objetivo era hacer "una película que celebrara la vida" a partir de una historia "sobre no estar en control", y recordó entre lágrimas que poco después de iniciado el rodaje ocurrió el trágico fallecimiento de su hija en un accidente, por lo que dedicó lo que calificó como "milagro" en su nombre.
Además, durante la ceremonia la película de Netflix "La madre del blues" recibió los premios a Mejor Vestuario y Mejor Maquillaje y Peinado, mientras que "El sonido del metal", de Amazon, recibió el galardón por su brillante trabajo en Sonido.