21 DE OCTUBRE, DÍA MUNDIAL DEL AHORRO DE ENERGÍA
El decano de la UTN Resistencia, Jorge de Pedro, aseguró que la conciencia del consumo “inicia en el seno de la familia”. “Debemos tender a aprovechar los recursos naturales renovables como la energía fotovoltaica”, aseguró.
Este miércoles 21 de octubre se celebra el Día Mundial del Ahorro de Energía, a propuesta de la comunidad internacional activista del ahorro energético.
El decano de la Facultad Resistencia de la UTN (Universidad Tecnológica Nacional), Jorge de Pedro, se refirió en diálogo con la Agencia FOCO al ahorro energético “comienza a trabajarse desde el seno de la familia. No nos tenemos que limitar a que la única energía posible que podemos tener en la casa en la de la red eléctrica”.
“Hay que reconocer que hoy como comunidad no tenemos una conciencia del ahorro bien formada. Suelen ser los chicos en edad escolar los que concientizan a sus padres con lo que aprenden en la escuela”, aseguró De Pedro.
En ese sentido, aseguró que “el Chaco tiene un potencial enorme para sacar provecho a energías alternativas como la solar o fotovoltaica, así como la eólica en menor medida”.
“La tecnología existe e instalar el sistema fotovoltaico no significa dejar de pertenecer a la red de Secheep, la vivienda nunca se desconecta de esa red. Lo que se genera es una fuente de energía diurna, y por la noche se vuelve a conectar a la energía de red, eso en el caso de los sistemas fotovoltaicos sin almacenamiento. En los que son con almacenamiento, las baterías almacenan la energía y se puede usar en el periodo nocturno”, comentó la autoridad académica.
De Pedro, graduado en ingeniería química, aseguró que otra de las propuestas de alternativas en generar energía sin almacenar y el excedente, es decir, aquella energía no utilizada en la vivienda, proveer a Secheep, y de esta manera la empresa luego aplica un descuento en la boleta de luz, “aunque para ello se requerirán medidores bidireccionales”.
Hugo Zurlo, docente en la UTN, dialogó también con esta agencia y aseguró que “la conexión con Secheep nunca dejará de existir, siempre tendrá conexión con la vivienda. A lo que se apunta es que la vivienda pueda alcanzar hasta un 80% de autonomía y tener a la red eléctrica como respaldo”.
En términos económicos, hoy esta tecnología lejos está de ser accesible. Se calcula un dólar por cada watt por hora. Una vivienda de dimensión media suele consumir alrededor de 1000 kilovatios por hora en un mes (una vivienda de dimensión común, unos 350 kilovatios por hora al mes), por lo que una instalación acorde a ese consumo costaría unos 1000 dólares, cuyo costo “se amortizará a los 10 años, teniendo en cuenta el mantenimiento y que en ese caso sería el sistema sin almacenamiento, es decir, sin baterías”.
En tanto, el sistema que incluye el almacenamiento duplicaría la inversión. Para una vivienda que consume 1000 kilovatios al mes, la inversión sería de unos 2000 dólares, costo que se amortizará recién a los 20 años.
Sin embargo, Zurlo aseguró que existe una tendencia en estos costos a bajar, por lo que “se puede prever que en unos años será más viable acceder a esta tecnología”.
En agosto de 2019, la entonces gestión provincial había anunciado que se construiría en el Chaco la primera central de generación aislada híbrida solar-térmica en el país.