El actor se abrió en PH, Podemos hablar y habló de una faceta poco conocida de su vida privada sobre la que históricamente prefirió callar.
Por primera vez, Diego Ramos se animó a soltar prenda de su vida amorosa, algo que, hasta ahora, siempre había guardado bajo siete llaves. Celoso de su intimidad, el actor nunca había hablado abiertamente de sus parejas. Y anoche, un poco porque le tiraron de la lengua, y otro poco porque seguramente se sintió lo suficientemente cómodo como para hacerlo, finalmente se abrió en PH, Podemos Hablar.
El tema había quedado picando en el aire luego de que Diego Ramos le respondiera a Andy Kusnetzoff que en este momento estaba viviendo “un gran amor”. Afirmación que Luisa Albinoni no olvidó y sobre la cual, más tarde, volvió a la carga, cuando le preguntó al actor por qué no contaba con quién estaba, si era feliz. “Yo creo que a la gente le encantaría saber con quién estás”, lanzó ella.
Ahí fue cuando el actor aclaró que, si bien alguna vez se había referido al tema, había algo de su intimidad que nunca le había gustado compartir. "No es que quiera esconder nada, pero siento que mi vida es lo más normal del mundo”, aclaró, y agregó que nunca le había gustado que se hable de él por fuera de su trabajo. “No siento la necesidad de abrir una puerta que después no voy a poder cerrar”, añadió. Aunque fue claro con que no tiene nada que ocultar, si lo ven acompañado o le sacan una foto. “A lo mejor en otras épocas yo suponía que era mejor no decir ciertas cosas, porque eran otras épocas, precisamente", siguió.
En este sentido, el actor señaló que lo suyo no era ser “reservado”, pero lo que no le parecía era revelar cosas que cree que “son obvias”. "Convivo, no me escondo, de hecho, me podés ver en cualquier lado en pareja y todo el mundo sabe, pero no me veo contándolo públicamente", le espetó a la actriz. Pero se ve que la cuestión siguió reverberando en la mente de Diego, porque luego, en otro tramo del programa, volvió a referirse a lo que había pasado con Luisa.
"Recién pasó algo que yo quiero desear que no suceda más. Que no haya nadie que sienta que porque otro le pregunta por su amor, por sus sentimientos o por lo que es, con todo el amor como en el caso de Luisa, los dos sientan que están contra la pared y que un tercero crea que tiene que salvarlos de eso", empezó, emocionado. Luego, se mostró feliz con los avances sociales que vivimos, y recordó cómo años atrás se estigmatizaba y discriminaba a las personas por su orientación sexual.
"Yo no tengo ningún problema con lo que soy y siempre fui. No tengo problema en expresarlo, soy feliz con eso”, dejó en claro, y agregó que no tiene necesidad de “sentirse contra la pared”. Luego, admitió que prefiere no “abrir ciertas puertas para después no tener que cerrarlas”, pero que está muy orgulloso de ser quién es y con lo que siente. "Hay mucha gente que se levanta todos los días sufriendo lo que es, deseando ser otra cosa, y eso quiero que se erradique”, pidió a todas aquellas personas que piensan que hay algo mal en ellas por no responder a lo que supuestamente se espera de ellas.
“Cada uno tiene sus tiempos, sus necesidades y nadie tiene que decir nada", agregó. Finalmente, Diego pidió que se acaben los prejuicios e insistió en que se termine esa situación que genera la sensación de acorralar al otro cuando una persona pregunta por el amor. Y luego de decir que él siempre va a apostar por el amor, mencionó, por primera vez, el nombre de su novio: “Mi amor se llama Mauro".