El gobernador visitó, junto al cura de la parroquia, la obra del nuevo centro de adicciones en el barrio Jesús Pan de Vida donde se construyó un playón deportivo, además constató los trabajos de refacción integral en las capillas del barrio Mate Cocido y del barrio 10 de Mayo.
El gobernador Jorge Capitanich recorrió, este domingo junto al cura Daniel Benítez, las capillas de la parroquia Cura Brochero, en la zona Sur de Resistencia, donde se ejecutan distintas obras de infraestructura. Allí constataron la obra del Centro Pastoral Integral de adicciones Papa Francisco, las refacciones en la capilla San José Obrero y terminaron la recorrida en la capilla Padre de la Misericordia.
“Estamos muy contentos con estas mejoras porque la gente puede continuar disfrutando de los espacios”, apreció el cura Benitez y explicó que el eje de la parroquia es la atención especial a situaciones de adicción. “Se trabaja en todos los centros con adolescentes, jóvenes, adultos, y familias que sufren el daño que la droga provoca”, sostuvo.
Durante la mañana de este domingo, el gobernador recorrió distintas obras que se realizaron en capillas de la parroquia Cura Brochero, que abarca desde la avenida Alberdi hasta la ruta 11, teniendo como límite Norte la avenida Malvinas Argentinas y hacia el Sur continúa extendiéndose, abarcando una amplia población.
Capitanich y el sacerdote Benítez visitaron las obras en la capilla del barrio Vial “Jesús Pan de Vida”, ubicada en calle Isaías al 3000, donde se edificó de cero el Centro Pastoral Integral De Adicciones Papa Francisco, en el predio de esa capilla. Allí se construyó además un playón deportivo con cancha de vóley, básquet, fútbol 5 y espacio para actividades recreativas como zumba, danzas y patinaje.
Posteriormente, se trasladaron a la capilla San José Obrero del barrio Mate Cocido, que recibe y atiende a personas de ese barrio y asentamientos de alrededor. En el lugar se realizó una refacción total del lugar, en paredes, con revoque, pintura, iluminación, cielorraso y piso nuevo.
Por último, recorrieron la capilla Padre de la Misericordia en el barrio 10 de Mayo, donde se llevan adelante además de la tarea religiosa, actividades de contención y acompañamiento a la comunidad.
El sacerdote agradeció y destacó la importancia de estas obras para la comunidad. “La ayuda del Gobierno es crucial para que la gente tenga estos espacios, no solo para entender el aspecto religioso sino para descansar, hacer deporte, compartir la vida, sentirse acompañado en los dolores y sufrimientos. Se realiza una importante tarea religiosa, cultural, deportiva y también educativa, con apoyo escolar”, concluyó.