El velo de misterio que siempre acompañó a las relaciones de parejas swingers puede que hoy esté corriéndose un poco. Saliendo de la oscuridad pero permaneciendo en la intimidad de cada pareja -como debe ser-, esta práctica al igual que muchas otras cuestiones relacionadas con la sexualidad y la vida sexual, están en boga.

Y aunque en los últimos años el movimiento ha ido ganando adeptos en la región litoraleña, lo cierto es que los espacios para el intercambio y la práctica no. Es así como en las últimas semanas, una publicación en las redes sociales causó revuelo y gran convocatoria.

La Fiesta Swinger que se llevará a cabo mañana agotó su cupo en la primera semana. Tras la gran demanda, los organizadores decidieron habilitar más lugares y nuevamente fueron copados. “Teníamos la esperanza de que la gente se sume pero no creímos que habría tanta respuesta a la propuesta. Las entradas se agotaron enseguida y hasta hoy nos sigue escribiendo mucha gente para sumarse al evento”, explicó Augusto Labella, antropólogo, consultor sexológico y educador sexual en diálogo con El Territorio.

Labella coordina la Fiesta Swinger de Posadas en conjunto con el sex shop Cielo Mío, que se hará en una casa quinta, con varios espacios ambientados para el relaje. Habrá comida, una barra de tragos y bebidas, música, espacios al aire libre y otros más cerrados, sala de estar y DJ; un ambiente ameno y adecuado para hacer amigos.

El espacio en el que se realizará la fiesta está reservado sólo a los participantes del evento, de modo que se respete la intimidad y privacidad de quienes asistan. “La principal regla es la privacidad, ni siquiera yo sé quiénes van. Las parejas que participan son matrimonios de muchos años, con hijos, con vida social y se trata de una cuestión íntima porque es una práctica sexual y una práctica de vida que se da puertas adentro”, resaltó el organizador, al tiempo que se refirió a los pilares swinger: “privacidad, respeto, consenso y comunicación”.

Participarán de la fiesta más de 40 personas y algunas podrán asistir con un amigo. “Del evento participarán parejas diverses. En este caso propusimos también que puedan asistir con alguien más. A veces pasa que una pareja está interesada, pero no pueden ir los dos esa noche o que alguno está interesado en saber primero cómo funciona la práctica, por eso esta vez puede ir un amigo por pareja, para ahondar en el ámbito”, detalló quien también conversó en Radioactiva.

Derribar tabúes

Derribando prejuicios, el consultor sexológico destacó que la dinámica del evento responde a prestar un espacio para que las parejas se conozcan. La idea es generar un aquí y ahora específico para que las personas puedan vincularse, conocerse y hacerse amigos, no necesariamente llegando al acto sexual.

“Se da la oportunidad para conectar con gente de la misma onda, con las mismas inquietudes. No todas las parejas que van saben ser swingers o cómo funciona eso; no hay códigos preestablecidos. La idea es que haya intercambios de charla, de experiencias de vida”, señaló Labella, resaltando que entre los swingers se establece primeramente un vínculo de camaradería y amiguismo entre las parejas.

En ese sentido, Labella resaltó que el acto sexual es la última instancia de la experiencia. Además, tras el sexo el vínculo suele disolverse para no confundir la relación genital con la afectiva.

La palabra swinger hace referencia al balanceo, el intercambio; generalmente son parejas que llevan mucho tiempo juntas y deciden por consenso explorar nuevas prácticas. “Se trata de una experiencia que refresca a la pareja porque uno explora una actividad de a dos que en este caso tiene que ver con el placer sexual. Con lo swinger se da algo muy interesante que es el hecho de que no sólo yo sé que estoy gozando o pasándola bien con otra persona, sino también sé que mi pareja también lo está disfrutando”, explicó.

De todas maneras, “las experiencias swinger no te definen para toda la vida. Hay mucho morbo detrás de todo esto y tiene que ver con la inexperiencia y la intolerancia que tenemos sobre las prácticas sexuales. En realidad, tiene que ver solamente con la exploración de los placeres”, especificó.

Swingers, una práctica en auge

A nivel mundial, Jamaica, Cancún, Playa del Carmen, Riviera Maya, Ibiza, Lanzarote y California, sumados a los cruceros temáticos, son algunas propuestas emblemáticas para la comunidad swinger. Es que el intercambio de parejas, más allá de una práctica sexual, se ha convertido en un negocio comercial. Según estimaciones de los propios espacios, hay unos 400 clubes de intercambio en los Estados Unidos y más de 600 en Europa. Mientras, en el país, la movida, que comenzó en la década del 80, se ha extendido a clubes, boliches y bares como una práctica en boga.

En tanto, en Misiones y toda la región litoraleña, la experiencia swinger se practica desde hace un buen tiempo. Los intercambios no se dan solamente dentro de la capital misionera sino también con y en el interior de Misiones, el norte de Corrientes y hasta el vecino Paraguay. Pero, en este contexto, la experiencia se practica de manera más íntima.

Actualmente -y en parte, por consecuencia de la pandemia- “hubo mucha exploración de la sexualidad hacia adentro. Las personas solas conectaron mucho con el autoerotismo, el placer personal y más; mientras que las parejas se vieron saturadas de la convivencia de todos los días”, detalló el especialista, resaltando así el auge y demanda de esta práctica que, al igual que otras tantas cuestiones relacionadas a la sexualidad, están dejando de ser tabú.

“Creo que es importante hablar de esto porque hace mucho vengo militando por una sexualidad responsable, placentera, afectiva y saludable. La sexualidad está más de relieve y me parece importante que instalemos estos temas. La gente tiene que tomar la decisión de salir del tabú”, cerró el especialista, destacando que pronto habrá otros encuentros destinados a abordas la sexualidad.