El mandatario chaqueño participó de la cumbre de gobernadores junto al presidente y al ministro de Economía de la Nación, donde planteó una serie de consultas sobre el acuerdo en cuanto al equilibrio entre precios, tarifas, ingresos, y especialmente sobre las políticas para la recuperación del salario real y el empleo privado.
El gobernador Jorge Capitanich participó este miércoles de la cumbre de mandatarios provinciales encabezada por el presidente Alberto Fernández y convocada por el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, con el objetivo analizar los alcances de las negociaciones que el Gobierno Nacional mantiene con el Fondo Monetario Internacional (FMI). “La deuda nos condiciona severamente, y los responsables deben ser juzgados por la ciudadanía y la Justicia. Este endeudamiento fue para la fuga de capitales, y eso el pueblo chaqueño lo tiene que saber”, manifestó el mandatario.
“Si bien la negociación es la mejor en la perspectiva de lo posible para la Argentina, nos condiciona severamente”, aseveró Capitanich, tras participar de la cumbre realizada en el museo del Bicentenario, que contó con la presencia del Jefe de Gabinete de Ministros Juan Manzur, el ministro del Interior Eduardo De Pedro, y 16 mandatarios provinciales.
Por su parte, el presidente Alberto Fernández remarcó: “Creo que vamos a lograr una reestructuración conveniente para Argentina, pero ese no es el punto de llegada, es un paso más de otros que debemos seguir dando para que la deuda pese lo menos posible. Sabiendo que en el punto de arranque es un peso muy grande y que nos condiciona”, aseveró.
El objetivo de la reunión fue analizar las negociaciones del Ejecutivo nacional con el FMI, en el marco de la atroz deuda tomada por el Gobierno de Cambiemos, que implicó el peor endeudamiento de la historia argentina, con 100.000 millones de dólares de préstamos, de los cuáles, además, se fugaron 88.000 millones de dólares.
Enfatizando el hecho de que el endeudamiento “fue un acuerdo urdido a espaldas del pueblo argentino, sin la aprobación del Congreso”, el gobernador detalló que el préstamo “no tuvo aprobación del Congreso, y nos afecta con una tasa de interés de más del 4%, cuando la tasa internacional tiene un valor cercano a cero”.
Durante su intervención, Capitanich hizo una serie de consultas sobre el acuerdo al presidente y al ministro de Economía, enfocadas principalmente en la posibilidad o no del aumento de tarifas, un esquema de equilibrio entre precios e ingresos, y especialmente sobre las políticas para la recuperación del salario real. "La pregunta es si el sendero de negociación entre tarifas, salarios y precio de los bienes forma parte también de esta agenda de los detalles de negociación", expresó.
Sobre estas consultas, el presidente Alberto Fernández respondió: “Hemos planteado que todo programa económico en la Argentina pasa por la recuperación del salario real. Los ingresos de los que trabajan deben superar el ritmo inflacionario. Venimos de una pérdida de 20 puntos en los cuatro años precedentes y tenemos que recuperar el salario real cuanto antes y del mejor modo, porque eso hace al mejoramiento del consumo interno que mueve más del 70% del PBI argentino”.
En cuanto a las tarifas, el presidente aseguró: “Nosotros no vamos a firmar ningún acuerdo que suponga un aumento tarifario desmedido. No hay ninguna posibilidad de que la Argentina tenga tarifazos en los años venideros. Mientras nosotros estemos gobernando, las tarifas tendrán que corregirse de un modo razonable y teniendo en cuenta el ingreso y la capacidad de pago de una sociedad dada en un momento dado”.
Guzmán: “El programa anterior no cumplió con ningún objetivo del acuerdo”
Durante su exposición, el ministro de Economía de la Nación, Martín Guzmán, apuntó que “el programa anterior no cumplió con ningún objetivo del acuerdo: no restauró confianza de mercado, no protegió a los más vulnerables de la sociedad, no fortaleció el marco para reducir la inflación y empeoró la sostenibilidad de la deuda en moneda extranjera. La auditoría del fondo planteó que había que reestructurar la deuda, en lugar de establecer regulaciones de capitales para evitar que el préstamo se use para la formación de activos externos y el diagnóstico sobre la inflación es un fenómeno monetario realizado por el gobierno anterior, era equivocado, ya que la inflación es un fenómeno multicausal”
Guzmán aseguró que “hay un asunto de responsabilidad colectiva. Cuando hablamos de un Estado-nación negociando con el resto de los países hablamos de toda la Argentina y es importante que haya acompañamiento del sector privado. Ha habido reuniones productivas en las cuales se lograron avances y se busca llegar a un acuerdo de precios. Por lo tanto, es importante que lo que se acuerde realmente sea algo que tenga el apoyo del país y sea un acuerdo del país. Y no es ético que los países en crisis financien los gatos del multilateralismo”.
La negociación con el FMI se realiza mediante un procedimiento secuencial, que primero requiere un consenso a través de una carta de intención que suscriben el ministro de Economía y la directora gerente del Fondo, Kristalina Georgieva. Luego esa carta tiene que tener el acuerdo del Directorio, con la representación de los países y finalmente, deberá ser notificado por Ley en el Congreso de la Nación.
Juzgar a los responsables del endeudamiento
El mandatario chaqueño también hizo especial énfasis en la necesidad de que “los responsables de este endeudamiento, que ha sido realmente cruento y que constituye un saqueo, deban ser juzgados y condenados, no solamente por la ciudadanía sino también por la Justicia”. Otro de los puntos llamativos del encuentro fue la ausencia del Jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
Señalando la existencia de un “silencio cómplice”, Capitanich afirmó que “lo que hicieron fue tomar una deuda de más de 45.000 millones de dólares. Lo que hizo Alberto Fernández es no seguir endeudándose, entonces ahora todos tenemos que pagar la fiesta que hicieron con los fondos de inversión”.
“Argentina no tiene la capacidad de repago que exige la deuda”, advirtió el mandatario y a su vez recordó que “el país ha tenido una reprogramación con los acreedores privados, que hay que empezar a pagar con servicios de intereses de la deuda”.
Por último, Capitanich señaló que “si uno paga esa deuda sabiendo que hay más viviendas, más agua, más cloacas, más pavimento, más terminales, más centros culturales, más infraestructura deportiva, más empresas que abren su estrategia exportadora, más empleos de buena calidad, mejores salarios para nuestra gente; todos estaríamos contentos. Pero la verdad es que este endeudamiento irresponsable sirvió para el saqueo, para que los fondos de inversión gocen con la tristeza ajena”, concluyó.
Presentes
Asistieron al encuentro los gobernadores de Buenos Aires, Axel Kicillof; Catamarca, Raúl Jalil; Chaco, Jorge Capitanich; Entre Ríos, Gustavo Bordet; Formosa, Gildo Insfrán; La Pampa, Sergio Ziliotto; La Rioja, Ricardo Quintela; Misiones, Oscar Herrera Ahuad; Neuquén, Omar Gutiérrez; Río Negro, Arabela Carreras; Santa Fe, Omar Perotti; Tierra del Fuego, Gustavo Melella; Tucumán, Osvaldo Jaldo. Los de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, Santiago del Estero, Gerardo Zamora, y Santa Cruz, Alicia Kirchner, están presentes mediante videoconferencia.
También dijeron presentes, por Chubut, el ministro de Economía y Crédito, Oscar Antonena; Córdoba, el presidente provisorio de la Legislatura, Oscar González; Corrientes, el vicegobernador, Pedro Braillard Poccard; Jujuy, el vicegobernador, Carlos Haquim; Mendoza, el ministro de Economía y Energía, Enrique Vaquié; Salta, el vicegobernador, Antonio Marocco; San Juan, el vicegobernador Roberto Gattoni; y Santa Cruz, el vicegobernador, Eugenio Quiroga.
Acompañaron al Presidente el jefe de Gabinete, Juan Manzur; el ministro del Interior, Eduardo "Wado" De Pedro; y los secretarios, de Asuntos Estratégicos, Gustavo Beliz, y General de la Presidencia, Julio Vitobello.