El diputado nacional electo por Juntos en la provincia de Buenos Aires, Facundo Manes, dijo hoy que "la coalición 2015-2019 ya no existe más", en referencia a Cambiemos, aclaró que "el radicalismo va a luchar por liderar" esa nueva conformación política, y apuntó contra los liberales porque a su entender "promueven la intolerancia".
En diálogo con FM Futuröck, Manes dijo que "el radicalismo se puso de pie" al destacar los 1.3 millones de votos que obtuvo su lista en las PAS= de setiembre, y los aportes que la UCR a la lista final, encabezada por Diego Santilli (PRO) y con Manes en el tercer puesto de nómina.
"La coalición 2015-2019 ya no existe más", advirtió cuando le preguntaron por el perfil del expresidente Mauricio Macri.
Para el neurocientífico "antes había una dinámica de un solo color" en la coalición, hoy denominada Juntos por el Cambio, pero habrá que "acostumbrarse a una coalición opositora con identidades diferentes".
Además advirtió que "el radicalismo va a luchar por liderar esa coalición", hasta ahora encabezada por el PRO.
"Los radicales queremos liderar la coalición y vamos a competir en todas las categorías y todas las jurisdicciones", repitió en otro tramo de la entrevista.
En tanto, Manes planteó: "Tenemos que hacer una coalición desde el centro, no convocando a los extremos", porque el país "necesita un acuerdo que la estabilice", por lo que rechazó los acercamientos de Macri al economista y diputado electo por la Libertad Avanza, Javier Milei.
Manes también opinó que la victoria de su lista, por poco más de un punto sobre el Frente de Todos, "es tan o más meritoria que en las primarias" porque esta vez "hubo mucho trabajo clientelar", según el radical.
"Me sorprende que el Gobierno festeje porque no ganó la elección", dijo más adelante el diputado electo, y añadió que "no hay nada para festejar" y nadie debería hacerlo porque "la Argentina es un fracaso colectivo".
Sobre la convocatoria al diálogo del Gobierno, opinó que "lo motivan la necesidad y no la convicción" y, a su parecer, por ese motivo "no es un diálogo sincero".
Finalmente criticó duramente a los sectores liberales. "No hay que dejar pasar la virulencia de algunos que se autodenominan liberales", dijo y consideró que "promueven la intolerancia y lesionan la convivencia democrática".