Aún no descarta su anhelado sueño de convertirse en campeona mundial, pero por el momento dedicará tiempo a sus proyectos, como su marca y el modelaje.
Andrea Sánchez, desde temprana edad sólo tiene en mente ser una boxeadora. Ahora, está a un paso del campeonato de boxeo de la FIB. Paralelo a ello, el modelaje también se le da muy bien a la argentina.
Argentina, país clave en América del Sur; que puede ostentar de tener una historia en el boxeo calado en letras de oro por aquellos grandes boxeadores quienes triunfaron entre sus paisanos y cosecharon para el exterior.
La “Cobrita” Sánchez apodo que heredó de su padre el afamado boxeador Martín, "La cobra". Viendo desde su niñez como su padre entrenaba, subía al ring y competía. Lo dejaría todo para irse a la capital, Buenos Aires, y así comenzar una etapa más decisiva en cuanto a enseñanzas y competición, ya que advirtieron en ella que gozaba de un potencial con mucho futuro.
Hoy es toda una mujer que entrena a fondo en busca de ofrecer de si lo máximo en el ring como boxeadora. No se detiene ante nada hasta cumplir su objetivo, una cualidad que refleja constancia y afán por llegar a lo máximo, puliendo cada detalle en su estilo y modo de concebir el boxeo.
David Rodriguez