El presidente Alberto Fernández que asumió al Gobierno el 10 de diciembre de 2019, publicó más Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) que en los cuatro anteriores por su sucesor. En 12 meses, firmó 76 documentos. Es decir, uno cada cinco días.
En tanto, Macri durante su gobierno publicó un total de 73 decretos de necesidad y urgencia. La anterior mandataria, Cristina Fernández de Kirchner, dictó 82 DNU en 8 años de gobierno.
Un informe de Chequeado.com reveló que en 1983 durante la presidencia de Carlos Menem fue cuando más se utilizó este recursos: 284. Seguido de Néstor Kirchner con 239. Luego, Eduardo Duhalde con 156.
Este año atravesado por la pandemia de coronavirus, el mandatario recurrió a esta herramienta para establecer cuarentenas, actualizarlas y habilitar actividades. Incluso, hasta la prohibición de despidos, pasando por el congelamiento de hipotecas y alquileres.
Además, también se suspendió la ley que fijaba los aumentos jubilatorios, el cierre de fronteras, la modificación de la Ley de Ministerios, la prórroga del Presupuesto, la declaración de la telefonía celular e internet como servicios esenciales y el relanzamiento del Procrear.
El inciso número 3 del artículo 99 de la Constitución Nacional indica que el jefe de Estado está habilitado a dictar este tipo de decretos “solamente cuando circunstancias excepcionales hicieran imposible seguir los trámites ordinarios previstos” por la Carta Magna para la sanción de las leyes. Además establece que debe hacerlo “en acuerdo general de ministros que deberán refrendarlos, conjuntamente con el jefe de Gabinete”.
Aunque en el texto se aclara que este tipo de decretos no pueden ser en temas que “regulen materia penal, tributaria, electoral o de régimen de los partidos políticos”.