El propietario del vehículo relató que regresaba de una cena con amigos en Villa Ángela cuando fue interceptado por varias personas en la ruta, quienes le sustrajeron el vehículo sin usar violencia.
El hombre viajaba de vuelta a Sáenz Peña, pasada la medianoche, por la Ruta Nacional Nº 95 cerca de La Tigra, cuando notó un automóvil que lo seguía con las luces intermitentes. A pesar de esto, decidió continuar su trayecto sin prestarle atención. Al llegar al cruce conocido como "La Negrita", vio a dos individuos que parecían ser policías haciendo señas con linternas, simulando un control de rutina. Al detenerse, uno de los supuestos agentes le pidió que bajara del vehículo para revisar el baúl.
Al descender del vehículo, otro individuo se interpuso frente a la camioneta, mientras que un tercer sujeto, que había bajado de un auto estacionado detrás de la camioneta, afirmó que era el mismo automóvil que previamente le había hecho señas de luces. Tras sacarle las llaves, uno de los delincuentes se subió a la camioneta, la dio vuelta en "U" y tomó la dirección norte por la Ruta Nacional Nº 95, hacia La Tigra, seguido por el otro vehículo.
Los sujetos restantes llevaron al propietario caminando, sin ejercer violencia, hasta el cruce de un camino rural con la ruta, indicándole que no se detuviera, sino que siguiera caminando. Después de unos 20 minutos, el hombre se percató de que los delincuentes se habían ido y regresó a la ruta para llamar a la policía, ya que no le habían quitado su teléfono ni su billetera. Intentó llamar al 911 varias veces sin éxito debido a la falta de señal en su celular.
Continuó caminando unos 300 metros por la banquina y la ruta hasta que finalmente, después de recorrer unos 20 km, logró obtener señal en el predio de SECHEEP y pudo llamar al 911.
Con la denuncia realizada, la División Investigaciones inició la búsqueda del vehículo, que fue encontrado abandonado en la Quinta 49 del Barrio San Cayetano. El fiscal a cargo ordenó la intervención del personal del Gabinete Científico del Poder Judicial y, una vez concluidas las diligencias, se solicitó la intervención del personal de drogas de la ciudad.